La fantástica temperatura de estos días ha propiciado que esta sea la Semana Santa perfecta, tanto para los que están de vacaciones como para los que trabajan a tope en el sector turístico.
La playa, los chiringuitos, restaurantes y terrazas han llenado su aforo en Salobreña, dando un respiro a los «castigados» negocios de restauración.
Las procesiones por el casco antiguo y el centro de la Villa han ofrecido el ambiente cofrade tan buscado en estas fechas, mientras que las playas están siendo el lugar perfecto para descansar y disfrutar de las agradables jornadas al sol que tanto esperábamos.
Una Semana Santa muy positiva para todos, con la satisfacción de vecinos, visitantes, cofradías y hosteleros.